Poemas de amor, de soledad, de esperanza de
Francisco Álvarez Hidalgo
Diccionetos (III)

Índice

Sonetos:
Miedo Libertad de expresión Amistad Generosidad Cotilleo Aflicción Culpabilidad Felicidad
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Breverías

2821
A silencio y vergüenza me acomodo, prolongando esta sádica violencia que desmorona mi estructura humana. Día a día lo voy perdiendo todo, y es la inseguridad que me sentencia a que por mí repique la campana. Si de este laberinto huir pudiera… Si mi grito, una vez, no enmudeciera…

2822
No sé cómo te llamas, pero un nombre, si te da a conocer, no te describe, y un verbo sólo indica ocupación. Te contemplé al pasar, y como el hombre que soy, que al admirarte no se inhibe, te di mi más audaz interjección.

2823
No hay juventud, vejez o edad madura para quien amanece cada día consciente de lo que es y lo que anhela. Sabiendo que la vida se apresura, renacerá con mágica energía cada instante fugaz que emerge y vuela.

2824
No vendrá a impulso de alas, ni en el regazo eufórico del viento, ni a intrépido redoble de tambores. En desnudez vendrá, sin otras galas, y si no estás atento, desaparecerá entre bastidores. Que la felicidad es caprichosa, y otorga sus favores a quien quiere, y de forma sigilosa.

2825
La juventud que ves no es envidiable, quizá ves su disfraz declamatorio, es más, te desconoces a ti mismo. Hay otra juventud más formidable, que llega con la edad, su territorio más íntimo y de menos egoísmo. En esta fase de la vida estoy, sabiendo cómo fue y por dónde voy.

Sonetos

3074 - Miedo
¿Quién agita la tralla de tu miedo? ¿El fantasma ancestral que viene a verte las noches de tormenta, sin que acierte tu zozobra a tocarlo con el dedo? ¿O el alma atormentada en el enredo de ultratumba, que intenta precaverte? ¿O puede ser, tal vez, la propia muerte, jugando al toro que eres en su ruedo? Que nada te amedrente; el miedo insiste en hacer realidad lo que no existe, aun la muerte, que no es sino distancia. Ha de llegar un día, ciertamente, mas no es sino una sombra en nuestra mente, y como tal no tiene relevancia.
Los Angeles, 2 de noviembre de 2012
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3075 - Libertad de expresión
“No he de callar por más que, con el dedo, ya tocando los labios, ya la frente, silencio mandes o amenaces miedo. ¿No ha de haber un espíritu valiente? ¿Siempre se ha sentir lo que se dice? ¿Nunca se ha de decir lo que se siente? (Francisco de Quevedo)
Libre soy de pensar, nadie limita o establece fronteras a mi mente. Mas esta libertad no es coherente al nacer la palabra oral o escrita. Recorta mi opinión, la debilita, quien alega excepciones, obediente al temor de una plebe intransigente, a sus propios remilgos circunscrita. Es virginal y etérea cada idea; si al surgir se disfraza, bastardea su linaje, candor, fidelidad. ¿Por qué hemos de cribar el pensamiento para aquietar al necio, en detrimento de nuestra confesión de la verdad?
Los Angeles, 3 de noviembre de 2012
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3076 - Amistad
Si sabes escuchar, serás mi amigo, y yo también he de escucharte atento, mas a palabras de aridez o viento ni espero tu atención ni a ellas me obligo. De perspicaz diálogo mendigo, salgo a tu paso. Sea ofrecimiento, por ambas partes, sin enfrentamiento, tu espíritu enlazándose conmigo. Te he de abrir el baúl de mis secretos, de mis intimidades, y los retos que me impone la agenda de la vida. Y esa misma conducta de ti espero. Cada cual en el otro, viajero por cada sombra y luz, afán y herida.
Los Angeles, 4 de noviembre de 2012
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3077 - Generosidad
El obsequio que otorgas a tu hermano va mucho más allá de la cuantía. Se mide su valor por la alegría proporcionada a ese otro ser humano. Más te engrandeces cuanto más enano te juzgue la pragmática jauría que oculta el oro en lúgubre alcancía, y al número declara soberano. Dé el corazón, más bien que la cartera, que es mejor el regalo de madera, si agrada al receptor, que el dispendioso. Y da aquéllos que tienen poco o nada, porque iluminarás en su mirada su reconocimiento silencioso.
Los Angeles, 5 de noviembre de 2012
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3078 - Cotilleo
Son las seis de la tarde. Tu jornada, casi como tu vida, irrelevante. Ni deberes domésticos ni amante torpedean la frívola escapada. Las amigas esperan tu llegada en la tertulia del Café. Radiante, realizas la entrada, y al instante cada voz es noticia y dentellada. Se visten de inequívoca certeza los más vagos rumores, y se empieza la lenta destrucción de honras y famas. Todo como verdad clara y desnuda. La reunión se dispersa, y nadie duda, pues han hablado respetables damas.
Los Angeles, 5 de noviembre de 2012
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3079 - Aflicción
La aflicción es inútil agonía que ni resuelve males del presente, ni suaviza el dolor que un incidente del ayer nos provoca todavía. Nos desata la vida su jauría de vandálicos perros: Accidente, muerte, oprobio, ruptura, y tal torrente de infortunios nos hunde o desafía. Se padece, solloza y desespera, y en nuestro entorno se alza una barrera con poca o nula opción de rebasar. Mas en contexto idéntico nos vimos tiempo atrás, y no obstante, subsistimos; por tanto, ¿qué nos puede doblegar?
Los Angeles, 6 de noviembre de 2012
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3080 - Culpabilidad
La culpabilidad es navajazo rasgándote la piel de la conciencia sólo si has procedido en la creencia de la maldad de tu palabra o brazo. Ya sea insulto, hostilidad, portazo, vástagos del enojo o la violencia, exigen implacable resistencia, y como terapéutica, el abrazo. Mas, ¿por qué esa polémica implacable de aclimatar morbosidad culpable al interior de quien no intenta herir? Libres somos, sin más limitaciones que el respeto a los otros. Las acciones que no hieren son nuestras a elegir.
Los Angeles, 7 de noviembre de 2012
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3081 - Felicidad
No es la dicha una meta en la distancia, que ambicionamos alcanzar un día, mas la visión que a nuestra fe se alía, y el paso a paso en cada circunstancia. Más que obtenerla, se hace en cada instancia, es la senda y la euforia que nos guía; la vamos construyendo, profecía que se va consumando en trashumancia. La vista está en el fin, siempre lejano, mas con nosotros van el pie y la mano, fraguando la ventura del momento. No hay más felicidad que ésta de ahora; la otra es ensoñación ofuscadora, inasequible luz del firmamento.
Los Angeles, 7 de noviembre de 2012
Diseño: Carmen Álvarez
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